Franklyn

No sabrás si te han tomado el pelo o estás ante una obra de culto de la ciencia-ficción.
Franklyn
Franklyn
Franklyn

Todo empieza en un mundo gótico imaginario en el que un tipo con tabardo se coloca una máscara con reminiscencias del Jack Skellington de Pesadilla antes de Navidad, de Tim Burton y Henry Selick (1993), y de El hombre invisible, de James Whale (1933). De repente volvemos al presente de hoy en día (bueno, de hace dos años, los que se ha tardado en estrenar el filme), en el que a un jovenzuelo le ha dejado la novia. Luego pasamos a una artista del suicidio y, por último, a un vejete que busca a su hijo.

Te pica la curiosidad. Vas pasando escena tras escena buscando un hilo narrativo entre las cuatro

historias y acabas rascándote la cabeza (¿es una metáfora de la familia?, ¿llegaremos en algún momento a saber cómo se pasa del mundo distópico al contemporáneo?) sin saber a qué atenerte. Llega el The End, los títulos de crédito y las preguntas continúan: ¿es Gerald McMorrow,director y guionista, un nuevo Richard Kelly y su película el Donnie Darko (2001) británico? ¿O tal vez queda más cerca de Kurt Wimmer y su Equilibrium (2002), ese “otro Matrix” que con el tiempo cada vez recluta más adeptos? Algo vería en este bisoño director Jeremy Thomas, productor habitual de las aventuras en inglés de Bernardo Bertolucci y que sabe mucho de este negocio, cuando quedó totalmente entregado al artista tras contemplar su corto Thespian X (2002).

Desde luego, McMorrow puede competir con Kelly en la estupefacción (o el mosqueo, va por barrios) que produce en el espectador, que no sabe si le han tomado el pelo o está ante una

obra de culto de la ciencia-ficción. Tampoco ayuda la dirección de actores, bastante mala y en la que no pasan de la mediocridad los conocidos Ryan Phillippe (que sustituyó a Ewan McGregor tras un accidente de moto), ni la nariz más inquietante del cine actual, Eva Green. Especialmente esta

última, que parece haber recibido instrucciones precisas de visionar toda la filmografía del Atom Egoyan de los años 80, sobre todo la centrada en la incomunicación a la que nos lleva la tecnología, para después poner cara de no entender nada (pero de tener una vida interior muy intensa) durante toda su actuación.

La parte onírica (o futurista, o lo que sea) es una auténtica maravilla, muy esteticista y comiquera, y revela a un gran lector de Alan Moore y su V de Vendetta, pero no es aprovechada en el resto del filme. Un 10 en plasticidad, pero un cerapio en narración, lo que hace que la miremos con desconfianza. Esto del cine, y hasta que no se demuestre lo contrario por más que se empeñen algunos, se trata de contar historias, no de lanzarlas sobre el público como si fueran huevos estrellados en una sartén.

RUBÉN ROMERO

Valoración:

FICHA TÉCNICA

Franklyn
  • Director:
  • Género:
  • País:
  • Sinopsis:

    Un ateo enmascarado siembra el terror en Meanwhile City, una ciudad en otro plano de la realidad controlada por una secta religiosa.

  • RESUMEN: No sabrás si te han tomado el pelo o estás ante una obra de culto de la ciencia-ficción.

  • ESTRENO: 10/12/2010

  • Ciencia-ficción / RU / 2008 / 98 min. / Director: Gerald McMorrow. Actores: Ryan Philippe, Eva Green, Sam Riley.

Mostrar comentarios

Códigos Descuento