Pedro Almodóvar: "Para mí sería una enorme paradoja que la Palma de Oro no se pudiera ver en salas de cine"

11 días por delante y 19 películas que juzgar es la misión en la 70 edición del Festival de Cannes de un jurado "variado y ecléctico", como lo ha definido su presidente, el director manchego Pedro Almodóvar. Una misión que sorprendió a Will Smith, sin duda el miembro más charlatán y divertido en la rueda de prensa, cuando se enteró de que tendría que ver "entre dos y tres películas al día, una de ellas a las 8.30 de la mañana". "Creo que no veía tantas películas al día desde los 14 años", bromeó, y prometió irse a la cama pronto y llegar fresco cada nueva mañana.

Para el actor americano, "nacido y crecido al oeste deFiladelfia", Cannes quedaba muy lejos, pero igual que para el resto de miembros del jurado. Jessica Chastain recordó que su carrera empezó en este mismo Palais, cuando subió las escaleras en 2011 por El árbol de la vida. Maren Ade, el año pasado, presentó la película más celebrada también aquí, Toni Erdmann. Incluso para Almodóvar, un habitual ya en este Festival, Cannes era un sueño.

"Mi primer sueño, y ya era bastante difícil, era hacer cine y Cannes venía inmediatamente después como algo irrealizable, pero desde el años 82 que empecé a venir como espectador para mí Cannes siempre es una gran fiesta, el lugar por excelencia donde se celebra el cine de autor que como espectador es mi género –si es un género– favorito, y también como director. Como miembro de este jurado tan variado y ecléctico espero que tengamos la misma sensación que debieron de tener los jurados cuando vieron Viridiana o La dolce vita por primera vez, o cuando se encontraron con Apocalypse Now. Y espero que ese milagro ocurra y nosotros seamos los primeros testigos de ese milagro".

Entre esas 19 películas puede que se aparezca el milagro, aunque ya de entrada tienen un debate entre manos: la entrada de Netflix en la selección oficial con dos películas, Okja y The Meyerowitz Stories, que provocó el enfado de los exhibidores franceses y la reacción de Cannes con una nueva ley prohibiendo, a partir del año que viene. la entrada en competición de películas que no lleguen a las salas de cine.

Cuando le preguntaron al jurado qué preferían si una Palma de Oro o que su película se viera en 190 países (tantos como a los que llega la plataforma en streaming), Almodóvar fue muy claro y rápido en contestar: "Prefiero ser visto no solo en 190 países, sino siempre ser visto en una gran pantalla. Es lo que siempre me preocupa", dijo y en la sala de prensa se oyeron aplausos. El director, que el año pasado competía aquí mismo con Julieta, venía preparado para lo que él mismo también definió como el "debate del Festival" con una declaración:

"Las plataformas digitales son una nueva forma de ofrecer contenidos de pago lo cual en principio es bueno y enriquecedor, esta nueva forma no debe tratar de suprimir las ya existentes como ir al cine, no debe alterar los hábitos de los espectadores y creo que ese es el debate ahora mismo. Para mí la solución es simple, las nuevas plataformas deben asumir y aceptar las reglas del juego ya existentes que implican respetar las actuales ventanas de los distintos formatos de exhibición, así como las obligaciones de inversión que actualmente rigen en Europa. Por otro lado, para mí sería una enorme paradoja que la Palma de Oro, y cualquier otro premio, no se pudiera ver en salas"

Y después, quiso matizar: "Esto no significa que yo no respete y celebre todas las novedades que las nuevas tecnologías nos proporcionan, estoy absolutamente a favor de ello. Pero me da la impresión de que mientras siga vivo defenderé algo que muchos jóvenes no conocen: la capacidad de hipnosis que tiene una gran pantalla frente al espectador. Creo firmemente que, al menos la primera vez que uno ve una película, la pantalla no debe de ser parte de nuestro mobiliario, sino que debemos ser diminutos para poder sentirnos dentro de esas imágenes y arrastrados por esa historia".

A lo que Will Smith también quiso añadir su punto de vista: "Tengo un hijo de 16 y 18 en casa que van dos veces a la semana al cine y también ven Netflix, y no sé lo que pasa en otros casos, pero en el suyo, Netflix no tiene ningún efecto en los motivos por los que van al cine, van al cine ser impresionados ante ciertas imágenes y otras películas prefieren verlas en. Son dos formas completamente diferentes. Es mi casa Netflix es un beneficio porque ven cosas que no habrían visto de ninguna otra forma, Netflix es conectividad. En mi casa ha traído una comprensión cinemática global".