Mitos del futuro próximo: 9 novelas de ciencia-ficción que deberían ser películas

Repasamos los libros de ciencia-ficcion que llevan décadas esperando a convertirse en filmes, o en los que nadie se ha fijado a la hora de rodar una película fantástica. ¿No te lo crees? Compruébalo en este informe.

El libro: Frederick Pohl y el difunto Cyril M. Kornbluth se marcaron una antológica sátira de la sociedad de consumo en esta novela. El protagonista, Mitch Courtenay, es un ejecutivo de publicidad que sobrevive en un mundo futuro donde las compras son obligatorias, y los bienes cada vez más escasos.

La película: Visto que el argumento de Mercaderes... se parece mucho a una Mad Men con más mala leche y naves espaciales, el creador de la serie Matthew Weiner rescata los derechos para el cine (vendidos por Pohl y Kornbluth poco después de la publicación del libro) y ficha a su fiel Jon Hamm para el papel de Mitch Courtenay. Como el libro fue escrito en los 50, el galán ni siquiera tiene que cambiar de vestuario para protagonizar esta ficción retrofuturista.

El libro: ¿Por qué, puestos a adaptar obras del gran Stanislaw Lem, los cineastas se fijan siempre en Solaris? Esta aventura espacial, con más que unas gotas de terror, se presta a un filme mucho más espectacular: su argumento nos cuenta la historia de unos astronautas perdidos en un planeta donde la forma de vida dominante son unos insectos robóticos y muy peligrosos.

La película: Tras llegar casi a las manos con James Cameron por hacerse con la novela, finalmente es Ridley Scott (quien ha vuelto a pillarle el gustillo a la ciencia-ficción tras Prometheus) el que se hace cargo de la adaptación al cine de El Invencible. Ryan Gosling, chico de moda, interpreta al protagonista Ronan, mientras que H. R. Giger (diseñador de Alien) retorna al cine por todo lo alto con sus bocetos de los bicharracos electrónicos.

El libro: Tan cósmico y cibernético como siempre, y escaldado del cine tras su colaboración con Stanley Kubrick en 2001, Arthur C. Clarke obtuvo un enorme éxito entre el fandom con esta novela, que generó cuatro secuelas escritas por él mismo y otras dos obra de Genry Lee. En ellas asistimos al encuentro de la humanidad con una gigantesca astronave extraterrestre que aparece, para no variar, en la órbita de Júpiter.

La película: Desde el lejano 1993, Morgan Freeman y David Fincher están enfrascados en llevar el novelón de Clarke al cine. Pese a los problemas de salud del primero y las vacilaciones del segundo (quien, para variar, tiene la agenda siempre repleta), parece que el proyecto sigue en activo. Si se llega a realizar, apostamos lo que queráis a que la prota será Rooney Mara.

El libro: Ganando el prestigiosísimo Premio Hugo con esta ucronía (en cristiano: relato de historia alternativa) Philip K. Dick no dejó de vivir en la miseria, pero sí logró que se lo tomasen más en serio como escritor. Y no nos extraña, porque pocas novelas han descrito con más precisión un mundo en el que nazis y japoneses ganaron la II Guerra Mundial.

La película: Actualmente, Ridley Scott (sí, otra vez él) proyecta una adaptación al cine de El hombre en el castillo en la que ejercería como productor ejecutivo para la BBC. El formato de serial le pegaría mucho a un libro tan intrincado, pero con lo bien que le quedó Blade Runner (basada en otra obra de Dick), ¿por qué no llevarlo a la pantalla grande? Y, es más, ¿por qué no contar con Harrison Ford como intérprete del escritor enigmático Hawthorne Abendsen?

El libro: Aunque parezca mentira, la guerra de Troya está teniendo lugar ahora mismo... Sólo que en Marte, a los pies del Monte Olimpo. Desde la cumbre de esta montaña, la más alta del sistema solar, unos dioses cubiertos hasta las cejas de tecnología observan y manipulan del devenir del conflicto sin saber que sólo son una pieza más de uno de los habituales potajes que Dan Simmons cocina a partir de obras literarias de todo pelaje y condición.

La película: Ilión y su secuela Olimpo son dos de esos libros (junto a la saga Hiperión, también de Simmons) cuyo salto al cine se discute desde hace años. Algunos dirán que el material le viene un poco grande a Zack Snyder, por lo sutil y alusivo, pero garantizamos que en él hay bastante violencia, y bastantes griegos cachas, como para que al autor de 300 le salga una película muy apañada.

El libro: Bienvenidos, lectores, al universo del autor Iain Banks y al territorio de La Cultura, una civilización de humanos y máquinas cuyas únicas leyes son "Diviértete y sé útil", no necesariamente en ese orden. En esta utopía cósmica, todo transcurre pacíficamente... Hasta que las cosas se caldean y el Departamento de Circunstancias Especiales tiene que echar mano de mercenarios psicóticos como Zakalwe.

La película: Incomprensiblemente, ha habido pocos intentos por filmar ninguna novela de La Cultura. Pero, por lo británico y por lo bruto, nosotros nos imaginamos a Zawalke con la cara de un Jason Statham del espacio exterior. ¿Qué tal le sentarían a sus aventuras la mano directora de Guy Ritchie?

El libro: ¡Ay, qué duro es ser un cuadrado! Tu vida es la de un mero funcionario al servicio de los polígonos más complejos. Para colmo, cuando sufres un encuentro en la Tercera Fase con una esfera, tus intentos de convencer al mundo de que hay más de dos dimensiones sólo despiertan incomprensión y persecución. Ignorada en el año de su publicación, el pionero trabajo de Edwin Abbott es uno de los clásicos de culto más descacharrantes y geométricos de la literatura.

La película: Planilandia tuvo una adaptación (inédita en España y directa a dvd) en 2007, con la voz de Martin Sheen entre otros. Pero la verdad es que se merece una versión fílmica con más medios y más profundidad, valga el chiste: el equipo de Pixar podría hacer maravillas a partir de su argumento.

El libro: Si tu nombre es Hiro Protagonista, hay dos opciones: o bien tus padres eran muy fans de Héroes, o bien eres el protagonista de una novela cyberpunk como esta, repleta hasta la bandera de drogas, virus informáticos, drogas, lingüística, más drogas... No te llames a engaño: por mucho que al personaje principal de este libro de Neal Stephenson le guste fardar de nombre, en la vida real curra como repartidor de pizzas.

La película: Harto ya de que le acusen de haber remakeado Pocahontas con alienígenas y en 3D (Avatar), James Cameron se lanza a la piscina de la ciencia-ficción contemporánea para demostrar que a él no le gana nadie imaginando distopías del futuro próximo. Arnold Schwarzenegger, viejo colega, hace un bienvenido cameo como Vytaly Chernobyl (sacándole partido a su acento).

El libro: La mayor ironía de esta novela de William Gibson sobre piratas informáticos e inteligencias artificiales no es que se llevase los 'tres grandes' (los premios Hugo, Locus y Nébula de literatura fantástica), ni que tuviese un papel en la difusión del cyberpunk tan grande, o mayor, que el de Blade Runner. Lo que más gracia nos hace es que el autor no tiene ni idea de informática, y escribió toda la obra en una vieja máquina de escribir.

La película: Tras docenas de intentos (sin exagerar) por convertir Neuromante en una película, nosotros predecimos que Vincenzo Natali (Cube) se quedará a las puertas, y será Christopher Nolan quien se lleve el gato al agua, terminando de una vez por todas esa adaptación que se anunció en 2010. Ya que el cásting parece aún abierto, ¿qué tal Joseph Gordon Levitt como el hacker protagonista? En cuanto a Molly, su secuaz femenina, la ex estrella porno Sasha Grey (The Girlfriend Experience) ya ha interpretado el papel en una lectura pública, y al propio William Gibson le pareció una buena elección.

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