Kevin Costner: "Waterworld' es una película muy querida en todo el mundo"

De todas las películas asentadas en el imaginario popular que este año han cumplido aniversarios redondos, Waterworld probablemente sea la que menos atención mediática ha recibido. No es de extrañar: el filme postapocalíptico dirigido por Kevin Reynolds con abundante implicación de su estrella, Kevin Costner, fue el fracaso financiero de moda durante toda una década. El problemático y accidentado rodaje disparó el presupuesto hasta 175 millones de dólares de la época; sus apenas 88 millones de recaudación en la taquilla de EE UU sentenciaron el batacazo anunciado. A pesar de que el total global subió hasta 264 millones y de que Waterworld tuvo un rendimiento muy notable en vídeo doméstico, la incorrecta percepción de fracaso se ha mantenido durante los años. Ya que en éste cumple 20, Costner ha querido recordarnos lo orgulloso que está de su superproducción acuática y, pese a lo que pueda parecer, lo querida que es por el público.

"Sé que la gente puede pensar en Waterworld como un punto bajo de mi carrera. No lo fue. Pudo haber tenido un efecto mejor, más obvio. Lo único que sé es que nunca tuve que defender con la cabeza bien alta una película cuando la mayoría va en el sentido contrario. Con todas sus imperfecciones, la película fue una alegría para mí. Me alegro al mirar atrás y haber participado en ella", ha declarado el actor en una serie de mensajes intercambiados con el periodista Jeffrey Wells. "No estoy seguro de si se sabe lo duro que trabaja la gente [en las películas]. No estoy seguro de si sabe lo querida que es esta película en todo el mundo. Ser duro [con ella] es muy fácil si no se sabe lo que hay debajo".

A decir verdad, Costner siempre se ha mantenido firme en su defensa de Waterworld contra viento y marea (con perdón). Y es indudable que, atendiendo a los datos financieros, su consideración como fracaso histórico ha sido ampliamente exagerada. Sin llegar a los niveles de reevaluación crítica de otros sonados bombazos hoy idolatrados, como La puerta del cielo de Michael Cimino, ¿crees que Waterworld se merece una reconsideración ahora que las aguas están más calmadas (perdón, otra vez)? ¿Pasará lo mismo dentro de dos décadas con Cuatro Fantásticos, la película-saco de boxeo de este año?