"Irónico", "lector de cómics", "ochentero" o "esteticista" son adjetivos que uno suele utilizar para referirse a James Gunn. Pero, ¿"autobiográfico"? Pues sí, fíjate: en el Festival de Cine de Shanghai (vía Variety Asia), el autor de Guardianes de la galaxia Vol. 2 ha declarado que un personaje de su pandilla galáctica es su álter ego en la pantalla.
¿De quién se trata? Pues de Rocket. De acuerdo con Gunn, el mapache con la voz de Bradley Cooper (y con los movimientos de su hermano, Sean Gunn) representa los años de juventud en los que se sintió "exiliado y olvidado", creciendo en Missouri, y alimentando sus retinas con una dieta de cómics antiguos, Star Wars y cine asiático. En concreto, el director mencionó a Johnny To (autor de la versión original de Infiltrados) y a Ringo Lam, cuya City on Fire sirvió de modelo a Quentin Tarantino para Reservoir Dogs.
"La mitad de una película es muy personal, porque se trata de los personajes", remachó Gunn. Y concluyó, bromeando: "A mí me crearon en un laboratorio para dirigir Guardianes de la galaxia".
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