James Gunn ('Guardianes de la galaxia') carga contra los Oscar

Como el mismo explicó al hablar de sus películas favoritas de 2014, el director James Gunn tuvo la agenda muy repleta durante la temporada pasada. ¿Por qué? Pues, básicamente, porque tenía que hacerle frente al arrollador éxito de su Guardianes de la galaxia. Pero ahora, con más tiempo libre por delante, este cineasta estadounidense de 44 años (una edad que cualquiera adivinaría, gracias a su cara de adolescente listillo) está dispuesto en convertir su Facebook en una tribuna desde la cual opinar sobre lo divino, lo humano y las nominaciones a los Oscar 2015. Como tantos otros, Gunn no está nada contento con las elecciones de la Academia de Hollywood para sus premios gordos, y se ha tomado la molestia de detallar sus objeciones en un post que también incluye algún aspecto positivo que otro (como una felicitación al amiguete Bradley Cooper -El francotirador- por su candidatura a Mejor Actor Principal) y que  nosotros traducimos y resumimos para ti en sus puntos más importantes.

* ¿Dónde está La Lego película? El primer motivo que encuentra James Gunn para su cabreo es uno muy justificable: la ausencia del filme de Phil Lord y Chris Miller entre los nominados a Mejor Película de Animación. Bueno, el hecho de que Chris Pratt le preste su voz al personaje principal tal vez haya influido, pero aun así lleva razón. "Es una de las mejores películas del año, y por descontado también una de las mejores películas animadas", explica el director, que ofrece a continuación una posible explicación para este olvido: "Dado que la edad media de los académicos es de 63 años, a lo mejor una película sobre Tinkertoy o Erector [dos juegos de construcción estadounidenses lanzados a principios del siglo XX] les hubiese interesado más". A juzgar de Gunn, "no es posible encontrar una razón para que no la hayan nominado, salvo que los miembros de la Academia pensasen que se trataba de una tontería (como yo mismo, la primera vez que oí hablar de La Lego película) y no se molestasen siquiera en verla".

* Actores que no están nominados (pero deberían) Parece que James Gunn piensa como nosotros: la omisión de Jake Gyllenhaal por su papel en Nightcrawler es uno de los olvidos más injustificables de esta edición de los Oscar: "Dios, que bien actúa en esa película". Ídem para Amy Adams, ganadora del Globo de Oro por Big Eyes que aquí no ha llamado la atención de la Academia.

* ¿Y qué hay de Guardianes de la galaxia? Tenía que pasar: Gunn también tiene protestas en cartera a cuenta de su propio filme. Sólo que, en lugar de preguntarse por qué no lo nominan a Mejor Película, como los hermanos Russo a cuenta de Capitán América: El Soldado de Invierno, es más modesto y apunta sólo a las categorías técnicas: el hecho de que Guardianes... sea candidata a Efectos Especiales y Maquillaje y Peluquería no le parece suficiente. "Creo que nuestra diseñadora de vestuario, Alexandra Byrne, nuestro director de producción, Charles Wood, y el equipo de sonido de Skywalker Sound han padecido un olvido tan malo como el de cualquiera", señala. Tras apuntar esta injusticia, no obstante, se despide con un señor pullazo: "Creo que tendrán que conformarse con haber trabajado en una película vista por más gente que las siete nominadas a Mejor Película juntas".

* Una película sin director, y un director sin película Para James Gunn, la Academia ha cometido una incoherencia supina con dos películas: Whiplash, que está nominada a Mejor Película sin que Damien Chazelle haya obtenido una candidatura a Mejor Director, y sobre todo Foxcatcher, nominada a Mejor Director pero no a Mejor Película. "No lo pillo", comenta el cineasta sobre esto último. "El director es el responsable último de un filme: aunque hay grandes películas que no han contado con grandes directores, es muy difícil identificarlas sin haber trabajado en ellas. Me cabrea mucho cuando una película tiene una nominación sin que su director sea candidato".

* No conviene sacar las cosas de quicio Gunn se despide recordando que "la Academia tiene un historial de malas decisiones: al fin y al cabo, Qué verde era mi valle le ganó el Oscar a Ciudadano Kane en 1941", y que conviene recordarlo antes de derrochar bilis por algo tan tonto como una estatuilla dorada: "Hay razones para volcar coches en la calle, pero que Jennifer Aniston no haya tenido su nominación por Cake no es una de ellas. A la postre, la Academia es sólo un grupo de personas como tú y como yo, haciéndolo lo mejor que pueden. Y deberían tener el derecho a no votar por quienes les parezca... salvo en el caso de La Lego película. Quiero decir, eso es jodidamente ridículo".