Mucho antes de convertirse en cómico (El club del chiste) y de tomar la alternativa como cineasta (El tutor), el ahora célebre Diego Arjona se curtió con algunos cortometrajes de juventud como Abracadabra o Exitus 2 - Albacete 0.
Precisamente, este último trabajo vuelve a estar de actualidad más de una década después, ya que en plena fiebre por Bohemian Rhapsody es imposible no recordar una de las historias que transcurrían por su más que surrealista metraje: en ella, Freddie Mercury, harto de que le pidieran que cantara We're the campions cuando iba a por tabaco, había fingido su propia muerte y vivía en Algeciras.
Allí, rodeado de ganadores de Gran Hermano y vendedores de patatas fritas, el cantante disfrutaba de su nueva y gaditana vida, aunque con una puerta abierta al pasado: tenía una máquina del tiempo en forma de bocadillo de mortadela que permitía viajar al mítico concierto que Queen dio en Wembley en 1986.
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