Cualquiera que siga la información gamer sabrá que la noticia del último mes y posiblemente del año, es el lanzamiento del videojuego de Spider-Man para PS4, una superproducción que ha llevado a jugones de todo el mundo a pasar semanas trepando por los muros de un Nueva York virtual.
El fenómeno desatado en torno al videojuego nos sirve para volver a echar mano de las estadísticas que hablan del crecimiento de los beneficios del ocio electrónico por encima del cine y la televisión, ya que los datos de venta dicen que en los tres primeros días, el juego -según USA Today- ha vendido un total de 3.3 millones de copias, recaudando 198 millones de dólares.
La cifra arrasa por completo la taquilla de los tres primeros días de Spider-Man: Homecoming, que hizo 117 millones de dólares (algo más de 99 millones de euros). Es verdad que entre un producto y otro hay un precio superior a los 50 dólares y que por tanto, mucha más gente puede haber disfrutado de la película de Marvel Studios, pero el dato es impresionante y nos hace recordar lo mucho que hasta ahora había descuidado Marvel el mundo de los ordenadores y las videoconsolas.
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