'Black Panther' e 'Infinity War' resucitan la taquilla de EE UU

Durante los últimos años, una noticia siempre repetida (pero nunca idéntica) se había instalado en las webs de cine: que la taquilla de los cines en EE UU había alcanzado un nuevo mínimo histórico, con la asistencia a las salas por los suelos y solo el alto precio de las entradas maquillando las cifras. Sin embargo, la National Association of Theatre Owners y la auditora ComScore afirman que eso ha cambiado. Según sus informes (vía The Wrap) la abundancia de blockbusters de éxito en 2018 ha hecho que la recaudación supere los 6.000 millones de dólares por primera vez, incrementándose un 9% con respecto a 2017. Y, si tenemos que buscar responsables, hay dos películas que destacan, ambas de Marvel: Vengadores: Infinity War y Black Panther.

La aventura en solitario de T'Challa (Chadwick Boseman), estrenada en febrero, se convirtió en todo un fenómeno cultural, acercándose a los 700 millones de dólares en taquilla. En abril, por su parte, Infinity War batió el récord del mejor estreno estadounidense de la historia (257,6 millones), superando la marca de Star Wars: El despertar de la Fuerza y dándole una nueva inyección de vitalidad a las estadísticas.

Aun así, Kevin Feige no es el único que puede sacar barriga con estos resultados. Las dos películas que pusieron en marcha esta recuperación, indica The Wrap, fueron dos estrenos navideños: Jumanji: Bienvenidos a la jungla y El gran showman (buenas noticias para Hugh Jackman). Más adelante llegaron otros hitos de taquilla como Deadpool 2 (la primera película no apta para menores que supera los 300 millones de recaudación).

Incluso Han Solo: Una historia de Star Wars ha puesto su granito de arena a una situación en la que también contribuyen Los Increíbles 2, Jurassic World: El reino caído y, a menor escala, Ready Player One y el nuevo récord de rentabilidad del terror indie, Un lugar tranquilo. Pese a todo el optimismo que pueden inspirar estos datos en los despachos de las majors, tengamos en cuenta que se trata de películas, bien respaldadas por franquicias de gran éxito, bien por el 'boca-oreja', bien por los directores de prestigio, por las buenas críticas o todo a la vez. Quizás esto persuada a las productoras de ofrecer más productos de calidad… pero, siendo Hollywood como es, lo dudamos.