10 años desde la mejor película de superhéroes: ‘Watchmen’

Cuando oyes por ahí “cine de superhéroes”… no solo puedes pensar en Marvel. Es nuestro deber recordar que 'Watchmen' sigue siendo la mejor.
10 años desde la mejor película de superhéroes: ‘Watchmen’
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10 años desde la mejor película de superhéroes: ‘Watchmen’

Lo dijo Terry Gilliam: “Watchmen es inadaptable al cine”. TERRY GILLIAM, el tipo que ha dirigido, entre otras locuras surrealistas y complejísimas a nivel narrativo, Brazil. Lo cierto es que no fue el único director que lo intentó, sin éxito, desde que el cómic se convirtiera en una de las obras de culto más importantes del siglo pasado.

Por el mismo trance pasaron también Darren Aronofsky y Paul Greengrass. Pero es que Watchmen no es un cómic cualquiera. En los 80, cuando aún los niños eran el público al que se dirigían los cómics, un grupo de autores que aglutinaban en sus creaciones sensibilidades e inquietudes adultas cambiaron el eje. Alan Moore era uno de ellos y tras fichar por DC les convenció para abordar temas adultos y coger a un conjunto de personajes no muy reconocibles para colocarlos en una historia muy oscura y muy retorcida que, por supuesto, terminaría con muchas muertes.

Aunque la idea no convenció del todo a DC, a Moore le dijeron que siguiera adelante con su proyecto con una condición, que los personajes fueran totalmente nuevos. Watchmen fue el resultado. Escrito por Moore y dibujada por Dave Gibbons. El cómic lo forman 12 partes que fueron lanzadas entre el 86  el 87. Hasta que no se publicó la novela gráfica de un solo volumen nadie se lo tomó en serio… Después, eso sí, fue adjetivada como una proeza artística, una obra de arte que combina la ciencia ficción con la sátira política y el entretenimiento más pop.

Evidentemente, esto no pasó desapercibido para los directivos de los estudios cinematográficos y el que no corre, vuela. El más rápido fue Lawrence Gordon. Enseguida se comenzó a desarrollar el proyecto de adaptación con Fox. Era, todavía, 1986.

Primero fue el propio Moore quién rehuyó involucrarse: “Con una película estás siendo arrastrado por el escenario a una velocidad de 24 cuadros por segundos. Con un libro de historietas puedes volver a mirar la viñeta anterior o puedes retroceder un par de páginas. Incluso el mejor director no podría obtener esa cantidad de información en unos pocos fotogramas de una película”.

Y no le falta razón. Si encima tenemos una historia como Watchmen, llena de saltos temporales, reflexiones muy densas de sus protagonistas, vidas humanas que nada tienen que ver con los protagonistas… la cosa se pone aún más difícil.

10 años desde la mejor película de superhéroes: ‘Watchmen’

Gilliam se metió de lleno en el proyecto e incluso llegó a elaborar un interesantísimo guión que cambiaba bastantes detalles del original: En su versión el Doctor Manhattan viajaba en el tiempo para evitar la creación accidental mientras que, al final, los otros personajes no eran más que cosplayers caminando por Times Square disfrazados. En esta versión Arnold Schwarzenegger hubiera sido Manhattan. Gilliam pedía 100 millones para hacerla y no le daban más de 25. Fin del proyecto.

El siguiente en llegar fue Darren Aronofsky, que acababa de tener un tremendo éxito con Requiem por un sueño. El guion era de David Hayter, que ya se había ocupado, y muy bien, de los guiones de los X-Men. Moore lo leyó y dijo que era lo más cerca que se podía estar de una versión cinematográfica de su obra. Aun así, Aronofsky no quiso meterse en el marrón y decidió que prefería dirigir La fuente de la vida.

Paul Greengrass  fue el último en llegar, pero su versión con Jude Law y Hilary Swank como protagonistas tampoco cuajó.

Zack Snyder había sorprendido a público y crítica con su fantástica versión cinematográfica del cómic de Frank Miller, 300, y se convirtió, de la noche a la mañana, en el candidato perfecto para adaptar Watchmen. Él, claro, estaba más que encantado. Su objetivo era ambicioso: hacer la adaptación más fiel de la historia del cine.

Snyder convenció a Alex Tse, que desarrolló aún más el guión de Hayter y negoció los 100 millones que hacía años ya pidiera Gilliam. Al final la película costó 120 millones de dólares.

CRITICAS MALAS Y PEORES

10 años desde la mejor película de superhéroes: ‘Watchmen’

Alan Moore fue el primero y su crítica fue demoledora:

“[Snyder] nos alimenta con una cuchara, lo que tiene el efecto de diluir nuestra imaginación colectiva. Es como si fuéramos pájaros recién nacidos mirando con la boca abierta esperando que Hollywood nos alimente con más gusanos regurgitados. La película de Watchmen podría compararse con gusanos regurgitados. Por mi parte, estoy harto de gusanos”.

Fueron muchos críticos los que tildaron Watchmen de espesa, ambiciosa, aburrida, sinsentido y lo que peor sentó de largo fue precisamente lo que más peleó Snyder, que fuera una adaptación milimétrica, la más fiel posible. Muchos no entendieron esta decisión, sin embargo, tiene mucho sentido cuando uno llega al final de la película y descubre que el plan del director era reproducir el alma atormentada de los personajes y el derrumbamiento de una sociedad putrefacta tal cual lo hacía la obra original para finalizar con un giro que simplifica y moderniza el cómic sin olvidar lo más importante: su tesis.

Lo único que hace Snyder es, en todo caso, aportar elegancia.

POR QUÉ ES LA MEJOR PELÍCULA DE SUPERHÉROES

10 años desde la mejor película de superhéroes: ‘Watchmen’

Más allá de su brillantez estilística –que, por cierto, no ha perdido ni un ápice 10 años después siendo todavía una experiencia visual como pocas– la madurez de su planteamiento, la perfecta síntesis narrativa (a pesar de sus dos horas y pico de metraje), su maravillosa banda sonora y sus dos o tres interpretaciones de reclinatorio, lo que hace que Watchmen sea una película de superhéroes insuperable es el final. La astuta y valiente decisión de Snyder de no cambiar ni una coma del cómic para cambiar el final es ya historia del cine. Se puede estudiar en las escuelas.

El cómic, para los que no sean confesos o no se acuerden, termina con un calamar gigante de características extraterrestres destruyendo prácticamente Nueva York entera. Una entidad cósmica y monstruosa no humana que pone fin a la Guerra Fría y deja en pause indefinido la cuenta atrás hacia el juicio final. El calamar es un proyecto de Ozymandias, más conocido como Adrian Veidt, dar al mundo un enemigo cósmico, una amenaza común que acabe con la tensión entre dos potencias repletas de armamento nuclear. La verdadera amenaza de la civilización.

La película de Snyder tiene un enfoque más simple pero mucho más dramático. En lugar de crear una criatura, Veidt recurre a una amenaza conocida: su antiguo amigo y compañero de equipo, el Doctor Manhattan. Un plan tan sencillo como destruir varias ciudades del planeta con explosiones que dejan la misma firma energética que la del Doctor. Justo antes de que este superhombre vaya a matar a Veidt, Nixon sale por la televisión anunciando la paz. EE UU y Rusia se unen ante la tragedia.

La tragedia es también una traición para los personajes principales. Rorschach entiende el sacrificio, como el resto, pero él sabe que no podrá vivir con ello… Doctor Manhattan el sacrifica y se va a vivir a otra galaxia. El héroe más puro y poderoso se va del planeta considerado una amenaza mortal mientras el villano que ha desfigurado la vida de la mitad de la humanidad se queda como un faro al que seguir para reconstruir los cimientos de un nuevo orden social. Un final paradójico y estimulante que, como mínimo, iguala las aspiraciones de Moore con el cómic original.

10 CURIOSIDADES PARA CELEBRAR 10 AÑOS

10 años desde la mejor película de superhéroes: ‘Watchmen’

1 Las banderas norteamericanas que salen en la película tienen 51 estrellas en vez de 50 porque, en la realidad alternativa de Watchmen, EE UU ganó a Vietnam como un estado después de la guerra. Gracias, como sabéis, al señor azul.

2 El nombre de Ozymandias se usa en el mismo contexto en el que también lo usan en Breaking Bad. Se refieren al  "rey de las cenizas", nombre con el que Búho Nocturno llama al villano.

3 La cinta usó los paneles del cómic como base para el storyboard. Es decir, la imagen que se ve en la pantalla es idéntica (o casi) al dibujo original.

4 En ningún momento el grupo de vigilantes es referido como "The Watchmen", sino que es un apodo que reciben bajo la frase "Who watches the Watchmen?" y, además, sigue la fonética del nombre del antiguo equipo llamado "The Minutemen".

5 Tim Burton estuvo involucrado en una producción de Watchmen y tenía contemplado a Johnny Depp en el papel de The Comedian… En lugar de eso hicieron Sweeney Todd y Alicia en el País de la Maravillas.

6 En los créditos Búho Nocturno detiene al ladrón que asesinaría a los padres de Bruce Wayne, esto, en el universo de DC, significa que nunca existirá Batman ya que el joven Wayne no tendría ninguna necesidad de convertirse en el hombre murciélago.

7 Las tres canciones de Bob Dylan que se usan en la película en la novela gráfica. Algunas como citas de apéndice en diferentes capítulos y otras de fondo en ciertas escenas.

8 El chiste del payaso Pagliacci que cuenta Rorschach hace referencia al poema del escritor mexicano Juan de Dios Peza. El texto se llama "Reír Llorando".

9 Durante los créditos iniciales, en una toma frente al Estudio 54, aparecen como referencia David Bowie, Mick Jagger y The Village People como fondo de Ozymandias.

10 Uno de los rumores más divertidos que surgieron de Watchmen fue que la elección de Jeffrey Dean Morgan como el padre de Bruce Wayne en Batman v Superman apuntaba a que él podría interpretar el papel del Batman del universo alterno de Flashpoint, cuando Bruce muere y su padre se convierte en el justiciero.

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