Basta con mencionar los nombres de Joffrey Baratheon o Ramsay Bolton para que cualquier habitante de los Siete Reinos sienta un ligero escalofrío. Sin embargo, esta temporada Cersei Lannister ha hecho méritos para ganarse las puertas del Infierno. Y eso es mucho decir tratándose de Juego de tronos. Las teorías conspiranoides auguran un funesto final para la reina malvada por excelencia, aunque de momento sigue vivita y maquinando.
Vale que en The Walking Dead tampoco les faltan malos, pero admitámoslo, Philip Blake, alias El Gobernador, hace que Merle Dixon y Negan parezcan hermanas de la caridad. Hasta como alucinación hubo que aguantar al temible (y tuerto) líder de Woodbury. Eso sí, Michonne tuvo parte de culpa al clavarle un cristal en el ojo derecho. Así se irrita a cualquiera...
Kilgrave. El que es para muchos el mejor villano en pantalla del universo Marvel, con permiso de Magneto y Loki, ha traído más de un dolor de cabeza (nunca mejor dicho) a la superheroína reconvertida en detective privado. Ella que, ilusa, lo daba por muerto… ¿Y ahora qué? ¿Habrá vida para Jessica Jones después de la muerte de su eterno y psicótico enamorado?
Y de Marvel a DC, con uno de sus villanos por excelencia: Pingüino. Gotham nos presenta al archienemigo de Batman en su etapa de gestación, sin sombrero de copa, pero con su característica personalidad metódica, manipuladora y retorcida. Y por si su maldad innata no fuera suficiente, muchos fans apuntan que podría tratarse del futuro Joker. El aún novato James Gordon no sabe la que le espera.
Sobrevivir cinco años en una isla infernal para volver a casa y reencontrarse con la Liga de los Asesinos, Amanda Waller y Slade Wilson. Y ahora, un fanático llamado Damien Dhark que, gracias a la magia, quiere reiniciar el mundo como si se tratara de un ordenador. Oliver Queen sabe de sobra lo que es enfrentarse a la escoria del universo DC, entre otros al todopoderoso Ra's al Ghul. Pero hace falta mucho más que atravesar su pecho con una espada para acabar con Arrow. Aunque cuidado, porque Malcom Merlyn, discípulo de Ra's y nuevo líder de la Liga, siempre está al acecho.
Hay cosas de las que ni siquiera Barry Allen, el hombre más rápido sobre la faz de la tierra, puede huir. Este año, sin ir más lejos, el misterioso Zoom ha ganado más de una carrera a Flash. Sin embargo, el llamado Flash-Reverso, también conocido como Doctor Wells, ha sido su mayor contrincante hasta el momento. Y es que descubrir que el hombre que mató a tu madre hace años, no es otro que tu mentor, que viene del futuro para destruirte, no es algo de lo que se recupere uno corriendo un rato.
Y del mundo de las mallas pasamos al de los trajes. Tyrell Wellick, de Mr. Robot, no necesita superpoderes para hacer de las suyas, para eso tiene E-Corp. El ambicioso vicepresidente tecnológico lucha contra los intentos de dinamitar su empresa. Y en sus ratos libres, paga a indigentes para que le dejen pegarles una paliza. Aunque si hablamos de villanos, su mujer no se queda atrás…
Y hablando de villanos trajeados, no podemos olvidar a Frank Underwood de House of Cards, el político más astutamente amoral y ambicioso que ha dado la televisión. Él que, rompiendo la cuarta pared, nos hace cómplices de sus complots. Se presentó ante nosotros por primera vez matando a un perro, y tampoco le hace ascos a eso de asesinar personas. “La democracia está tan sobrevalorada”, asegura.
"Éste llama a una ambulancia, éste otro a una funeraria. Voy a preguntárselo otra vez y dependiendo de la respuesta escogeré uno u otro". Lorne Malvo no sólo asesina impunemente, sino que además consigue corromper a todo aquel que se le acerca en Fargo. ¿Será el poder del flequillo de los Coen, que ya ejerció su oscura influencia en el Anton Chigurh de Javier Bardem?
Igual de brillante que el obsesivo detective inglés, James Moriarty es un rompecabezas indescifrable para Holmes, también en pequeña pantalla. Profesor matemático de día y sádico criminal de noche, esta especia de Jekyll y Mister Hyde arrogante es la némesis perfecta de Sherlock, al que ha convertido en su particular juguete.
Hay padres divertidos como Phil Dunphy, o despreocupados como Homer Simpson y Peter Griffin. También los hay conflictivos como Tony Soprano, y complicados como Dexter Morgan o Walter White. Y luego está Eli Pope en Scandal, al que no le tiembla el pulso a la hora de matar a un joven para volver a ser el jefe de una organización de espías encubierta. ¿Quiere a su hija? Sí, pero de forma malsana, retorcida y abusiva. Y si no que se lo pregunten a Olivia...
... o a Petra. De padres con problemas de autocontrol a madres sacadas de una telenovela. De Jane the Virgin, para ser exactos. Con un marcado acento checo, garfio en mano y el parche en el ojo derecho, Magda Andel no es una madre poco afectiva sin más, sino una psicópata con muy mala leche y obsesionada con controlar la vida de su hija. O terminar con ella, ahora que Petra ha ayudado en su detención.
Y hablando de villanas, si hay una serie que ha sido un hervidero de protagonistas malvadas, esa es American Horror Story. Cuando los seguidores creían haberse librado de las perversiones de los personajes de Jessica Lange, llega Lady Gaga con su papel de Condesa Elizabeth en el Hotel Cortez, una mortífera vampiresa sedienta de violencia, sangre y sexo. ¿Qué nueva villana traerá consigo la sexta temporada?
Pero incluso las historias más rocambolescas tienen a menudo su reflejo en la vida real. Pablo Escobar no sólo es uno de los nuevos villanos de la televisión gracias a Narcos, sino también uno de los criminales más famosos de la historia. En la nueva producción de Netflix, el rey de la cocaína esquiva a los agentes de la DEA mientras se transforma en el narcotraficante más rico de todos los tiempos. Nadie se hace tan asquerosamente rico de forma honrada...
SPOILERS DE 'QUANTICO', , Homeland lo dejó más que en evidencia: eso de desenmascarar a villanos ocultos en las altas esferas nos gusta. Y más si salpica a la CIA. O, ahora, al FBI. Nadie sospechaba que el ex agente del prestigioso bureau y profesor de Quantico Liam O’Connor pudiera estar detrás del mayor atentado terrorista en Nueva York desde el 11S. Y mucho menos sus propios pupilos, a los que iba tratando de incriminar uno a uno… Por si con las flexiones y las carreras mañaneras no hubieran tenido suficiente.
Stranger Things nos ha devuelto los 80, el cine de Spielberg y, de paso, a Winona Ryder. Pero además, ha traido consigo un nuevo villano con el que amenazar a todo niño travieso que se porte mal. Y no hablamos de ese monstruito que deambula por paredes, bosques y piscinas ajenas, sino del doctor Martin Brenner, el hombre de pelo blanco (como si los Malfoy no hubieran traumatizado suficiente a la anterior generación), aficionado a experimentar con niños y parco en palabras al que Eleven llama "papa".