Carlos Marañón Fútbol y cine
OPINIÓN

¿Virus FIFA? No, 'Goal of the Dead', la película francesa de zombies y fútbol

¿Virus FIFA? No, 'Goal of the Dead', la película francesa de zombies y fútbol
¿Virus FIFA? No, 'Goal of the Dead', la película francesa de zombies y fútbol
¿Virus FIFA? No, 'Goal of the Dead', la película francesa de zombies y fútbol

¿Recuerdas aquel partido de tu equipo en el que remontaron el resultado con una especial saña, donde volaron los contrincantes y se hizo sangre con la estrella rival? Mmmm. Ajajá.

Nada de 'Virus FIFA'. Esto es otro rollo.

Títulazos zombies. Si el clásico de George A. Romero en 1978, Dawn of the Dead, se tradujo como Zombi. El regreso de los muertos vivientes, y el remake homónimo de Zack Snyder en 2004 fue Amanecer de los muertos, ¿cómo le llamaríamos aquí a Goal of the Dead, la película francesa que por fin demuestra que, efectivamente, tu equipo puede estar infectado del virus de los muertos vivientes? Lo suyo sería Golear de los muertos, aunque si Shaun of the Dead (la de Edward Wright con Simon Pegg) fue Zombies Party, la película francesa que ha descubierto un nuevo género, campo abierto, para las películas de fútbol, debería ser, qué sé yo... ¿Zombies Match?

Goal_of_the_Dead-françaisergegoal_of_the_dead_chinese

Goal of the Dead, película francesa dividida como un partido de fútbol en dos mitades, a su vez dirigidas por dos realizadores diferentes, Thierry Poiraud (famoso por los vídeos musicales de Vanessa Paradis) y Benjamin Rocher (que lo petó con La horde, en 2009), fue estrenada en Francia el 27 de febrero y ya ha aparecido en DVD en varios países (en España se proyectó en el Festival de Sitges del pasado octubre). La premisa es cojonuda, y no, no es una crítica del dóping en el balompié. Aunque podría serlo. Tampoco una crítica a la falta de punch del fútbol francés (soy de los que siempre pensé que a los franceses lo que les gusta de verdad es el rugby). Aunque también podría serlo.

goal-of-the-dead-german-postergoal-of-the-dead-french

Sam Lorit (interpretado por Alban Lenoir) es un futbolista del Olympique de París (esa mezcla imbatible, definitiva, entre Olympique de Marsella –o de Lyon, oiga– y París Saint-Germain) que regresa a su pueblo a jugar una eliminatoria de Copa de Francia (subtexto muy presente en el cine futbolero francés, de El hombre del triciclo (Le triporteur) a Un gran equipo, pasando por Un mal día lo tiene cualquiera) contra el club modesto del que salió, frente a la opinión de la hinchada, dolida por su marcha. Dispuestos a convertirse en el matagigantes de la temporada, la plantilla del E. J. A. Caplongue, que así se llama el club, se conjura. tanto, que uno de sus futbolistas se inyecta lo que parecía una droga para rendir más sobre el terreno de juego y en realidad es uno de esos virus que tanto juego están dando en las películas de zombies, infectados y muertos vivientes varios. A partir de ahí, el caos, tan bien contado en el tráiler de la película...

P.D. Por cierto, al margen de la impronta de todas las películas de zombies del momento, con ese tono entre gore y cómico, hay cierta relación entre la historia del filme y un clásico del cine futbolero francés: À mort l'arbitre, un filme de Jean-Pierre Mocky, en el que un partido de fútbol se conviuerte en una auténtica cacería humana de unos aficionados con malas pulgas que quieren pillar al árbitro del partido tras una actuación, digamos, discutible del trencilla. Voilà, el póster de este antecedente futbolero quasi terrorífico.

a-mort-l'arbitre

Sigue ‘Fútbol y Cine’ en TWITTER

Todos los días, a todas horas, noticias de cine y series en CINEMANÍA

Mostrar comentarios

Códigos Descuento