Habíamos leído algún que otro rumor, pero la aparición de Mark Hamill en la première londinense de Guardianes de la galaxia parece confirmarlo del todo: Luke Skywalker portará una impecable barba jedi en Star Wars: Episodio VII. No hay nada más que comparar la foto de arriba con la foto promocional de Disney en la que Hamill volvía a agarrar un sable láser. El vello facil ha crecido y se ha hecho más frondoso durante el mes y pico que ha pasado, coincidiendo con el rodaje de la película de J.J. Abrams.
Si tenemos en cuenta los rumores sobre el argumento del Episodio VII, parece lógico que el Luke convertido en ermitaño y perdido en la otra punta de la galaxia adopte un look barbudo no muy distinto al de su maestro Obi-Wan Kenobi. De hecho, en declaraciones para la BBC, el propio actor bromea diciendo que su labor en la nueva película junto a las antiguas estrellas de la saga es "brindar su apoyo [a los nuevos personajes] y dejarse crecer la barba por obligación contractual". Una cláusula del contrato a la que, imaginamos, no estará sujeta Carrie Fisher.
Por cierto, que Hamill también tuvo palabras de aliento sobre la lesión de Harrison Ford, de la que esperamos que el actor se recupere rápidamente para poder reincorporarse sin problemas en la reanudación del rodaje a finales de agosto. "Hace falta mucho más que eso para detener a Harrison Ford", dijo con convicción su compañero.
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