El porno se pone en huelga para no ponerse condón

La industria del cine X en Los Ángeles, revolucionada por una medida que facilitaría las denuncias a los actores que no usen preservativo
El porno se pone en huelga para no ponerse condón
El porno se pone en huelga para no ponerse condón
El porno se pone en huelga para no ponerse condón

Sí, por un lado, reconocemos que Los Ángeles es uno de los principales centros de producción de cine pornográfico, y, por otro, asumimos que la producción de sexo explícito es una de las actividades más lucrativas de internet (2.800 millones de dólares de beneficios anuales sólo en EE UU, según datos de 2012), llegaremos a una conclusión por regla de tres: para el condado californiano, el porno es una industria muy valiosa. De ahí que medios tan 'serios' como The Hollywood Reporter y el San Francisco Chronicle  estén cubriendo una novedad que tal vez sorprenda a más de uno. Porque, en California, la industria del cine X está muy revolucionada, incluyendo manifestaciones y amenazas de huelga, debido a una posible medida legislativa que no sólo obligaría a sus actores a ponerse condón. También permitiría a los espectadores denunciar a aquellos intérpretes que apareciesen en pantalla sin el preservativo puesto.

La medida en cuestión es conocida como 'Proposición 60', se someterá a la votación de los electores californianos en las elecciones estatales del 8 de noviembre, y ha sido propuesta por un personaje muy polémico de la vida pública del estado: Michael Weinstein, magnate farmacéutico y responsable de la ONG anti-sida Aids Healthcare Foundation. Por un lado, la propuesta de Weinstein puede parecer razonable (las enfermedades de transmisión sexual, incluyendo el VIH, son uno de los mayores riesgos laborales del cine pornográfico). Por otro, estamos hablando de un personaje que ha sido tachado de "megalómano" por la agresividad de sus campañas.

Unas campañas que podrían llevar a los actores porno, no sólo a exponerse a multas o cárcel, sino también a la vergüenza pública. Porque, si la Proposición 60 se aprueba y estos intérpretes pueden ser enjuiciados por no usar preservativo, sus nombres y direcciones reales figurarían en los archivos judiciales, y podrían ser conocido para el gran público. "Esto es acoso", afirma un actor cuyo nombre de guerra es Alec Knight. Y prosigue: "Nuestro anonimato es muy importante para nosotros". Tommy Gunn, otro intérprete al que se vio en la serie El séquito, es todavía más contundente: "Están animando a los espectadores a denunciarnos". 

Por si a alguien le quedan dudas sobre la repercusión de esta medida, y sobre la importancia del porno en la economía californiana, concluyamos diciendo que el Los Ángeles Times (nada menos) ha publicado un editorial oponiéndose a la medida, señalando que esta podría hacer que el porno y sus millones abandonasen Los Ángeles para irse a otros estados, como Nevada, donde las autoridades son más comprensivas. Está claro: hoy más que nunca, el sexo y el dinero son uno y lo mismo.

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