5 cosas que hemos aprendido con ‘Política, manual de instrucciones’

El documental de Fernando León de Aranoa es un ejercicio inteligentey frenético sobre el ascenso de Podemos, que además sirve, efectivamente, como manual político.
5 cosas que hemos aprendido con ‘Política, manual de instrucciones’
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5 cosas que hemos aprendido con ‘Política, manual de instrucciones’

Fernando León de Aranoa ha seguido a Podemos durante 15 meses. Desde su cámara ha reflejado el frenético ascenso del partido que nació gracias a la brecha que el 15M abrió en la democracia. Ese partido de carácter asambleario, de la gente (desde donde combaten), nació y en tiempo récord ha llegado al Congreso. En total, 400 horas de imágenes: mítines, reuniones, debates internos (algunos muy duros), paseos por los pasillos, risas, nervios, decepciones y brazos en alto.

Con este material, el director de Barrio debuta en el género político (si es que su cine anterior no lo era) construyendo precisamente eso, un manual de instrucciones sobre estrategia política, sobre cómo tomar decisiones difíciles, sobre cómo ganar envites y asumir derrotas, sobre cómo surgir de las plazas para llegar al Congreso… Estas son las 5 cosas que hemos aprendido de la creación de esta “maquinaria política” que León de Aranoa documenta sin recurrir a la épica y con un ritmo muy ágil, casi tanto como las conversaciones que mantenían los chicos del presidente Bartlet en El ala oeste de la Casa Blanca.

LECCIÓN 1: LAS BATALLAS INTERNAS SON NECESARIAS

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Dos no discuten si uno no quiere. Pero tanto Pablo Iglesias como Pablo Echenique se enzarzaron hace dos años en una lucha dialéctica que marcaría el futuro de Podemos. Ambos querían y debían. En Vistalegre se lo jugaron todo, Iglesias y los suyos apostaban por un solo secretario general y el equipo de Echenique pujaba por tres portavoces y la elección por sorteo de un 25% del Consejo Ciudadano. Ganaron los primeros. Fernando León de Aranoa lo cuenta como un auténtico combate de boxeo, lento, duro, donde los dos reciben golpes, donde los dos se miden antes de atacar y donde los dos se abrazan cuando suena la campana.

Resumen de la lección: En política es muy importante tener diferentes opiniones incluso con los de tu mismo partido. De hecho esas diferencias (que no deben desunir, sino todo lo contrario) son las que harán crecer las posibilidades de éxito. Es cuestión de empatía, todo el mundo se pelea en su casa y los partidos políticos, también.

LECCIÓN 2: LA IMPORTANCIA DE LAS PALABRAS

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No es lo mismo que te llamen patriota a que te llamen patriota. Vale, os habéis quedado igual. Ahora lo explicamos. Fernando León de Aranoa profundiza en su documental por las diferentes estrategias o tácticas políticas que emplea Podemos para crecer en simpatizantes, para dar una imagen concreta de los valores de su partido y una de las más interesantes pasa por transformar términos anquilosados como “patriota” o “democracia” o “transición”. Y aquí Aranoa descubre al gran protagonista de la función, que no es Iglesias, no, es Íñigo Errejón. No hay nada que este actor (político) no pueda atajar, o envolver y transformar en un mensaje claro y accesible. Su carisma es su elocuencia, más o menos entre Woody Allen y Marlon Brando.

Resumen de la lección: Básicamente, cambiar términos como patrotismo (que significaba poner banderas en la terraza o llevar pulseras rojigualdas) para que pase a ser la gente, cualquiera de nosotros, llevemos o no banderas; el caso es que nadie se quede atrás. Lo que es revivir el viejo sueño democrático. Esto, de momento, es un work in progress.

LECCIÓN 3: NO IR CABREADO NUNCA A UN PLATÓ

Si leemos con atención la filmografía de Fernando León de Aranoa nos damos cuenta de que es un sentimental. Un tipo muy pegado a la gente que lo pasa mal, a los que están solos, a los que viven en un barrio de mierda, a las que se prostituyen, a los que están viejos y enfermos; y siempre, siempre, los trata como si fueran santos. Todos esperábamos con este documental el Evangelio según San Pablo (Iglesias), pero no. Aranoa ha conseguido un ejercicio muy calculado, muy frío, casi científico. Y claro, los momentos feos de esta carrera política centelleante han sido muchos, muchísimos. Deserciones y decepciones, cabreos, sueños rotos y caras largas. Como la de Pablo en uno de sus peores momentos en televisión.

Resumen de la lección: Aunque tengas delante a tu despiadado enemigo controla tu ira y rebaja el tono. No hagas como Pablo Iglesias cuando acudió a La Sexta Noche para llamar "Don Pantuflo" a Eduardo Inda. Es indecoroso.

LECCIÓN 4: HAY GENTE QUE HABLA COMO AARON SORKIN ESCRIBE

Según el periodista Pedro Vallín, Sorkin, creador y guionista de El ala oeste de la Casa Blanca, dijo en su día que ya le gustaría a él tener el verbo afilado de sus personajes. Pues efectivamente, y como señala Vallín, los hay. En este caso son Errejón e Iglesias. El primero más natural, el segundo más impostado, pero en cualquier caso igual de frenéticos que los personajes de Sorkin, desde Josh Lyman hasta el presentador de The NewsroomWill McAvoy.

Resumen de la lección: Si eres fan de Sorkin y un día te lo critican con ese argumento rancio de “Nadie habla como los personajes de Aaron Sorkin”, solo tendrás que recomendarles Política, manual de instrucciones. La realidad supera la ficción… otra vez.

LECCIÓN 5: SABER PERDER

Errejón

El documental es certero. Tanto, que resulta contradictorio, como la vida. Hoy estás aquí y mañana en el lado opuesto, hoy dices esto y después lo contrario. La incoherencia es la sal de la vida. Y también una herramienta necesaria en política, difícil de placar, por supuesto. Pero en definitiva, la contradicción es el síntoma de que la maquinaria política funciona. Fernando León de Aranoa no tiene miedo a mostrar esos choques con la realidad, esos cambios de viento que envenenan el ambiente en un partido que un mes reina en las encuestas y que al otro se derrumba. Por eso se van algunos, por eso se marcha Juan Carlos Monedero, el cuarto de los mosqueteros. Pero también hay que saber perder y en política hay que tener una estrategia para todo, incluso para la derrota.

Resumen de la lección: La mejor defensa es un buen ataque. Así que después de la derrota llega la remontada. Palabra (repasar la lección 2) que Podemos utilizó como impulso para unas elecciones que llegaban en el momento más incómodo.

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