Un año más, en el Museo Metropolitan de Nueva York se celebró la Met Gala, la gran fiesta que une moda, cine y música. El show del año que deja ya a los Oscar como un baile de instituto.
La excusa es inaugurar la exposición anual sobre moda del Metropolitan que esta vez se titula Manus x Machina: Fashion in an Age of Technology. Tradicionalmente, el tema de la exposición inspira a los invitados a la hora de elegir sus vestidos. Este año, por lo tanto, la tecnología y el futuro eran sus puntos de partida. Un tema demasiado abierto que muchas y muchos han interpretado con demasiada libertad y, sobre todo, en plateados. Si el futuro que nos espera es esto…
Seguramente, por el tema, Wintour aprovechó para invitar a las nuevas generaciones de familias Hollywood, como los Smith, Jaden y Willow; o Lily-Rose Depp y Hayley Baldwin. Por sus apellidos los reconoceréis.
Detrás de la Met Gala está la poderosísima Anna Wintour, directora de Vogue EE UU, quien en 17 años ha convertido este gran evento benéfico para recaudar fondos para el departamento de moda del museo en su fiesta privada. Ella invita y desinvita, como muestra el nuevo documental, The First Monday in May.
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